SNI: Veeduría y observadores industriales en Aduanas permitieron recuperar 15.4 millones de dólares para el fisco

  • Aduanas carece de técnicos especializados para identificar casos de subvaluación en la declaración de mercancías.

  • Se propone fijar precios indicativos en dólares por kilogramo neto para evitar que malos importadores evadan impuestos.

Lima, 4 de noviembre de 2018.- El gerente del Comité Textil-Confecciones de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), Martín Reaño, informó que la labor que realiza el gremio asesorando a la Aduana Marítima del Callao a través de sus Veedores, permitieron, en el periodo enero-setiembre 2018, el cobro para el fisco de 15.4 millones de dólares en impuestos que iban a ser evadidos mediante la práctica de subvaluación, sólo en el ingreso al país. Durante el mismo periodo del 2017 fue US$ 15.1 millones.

Reaño afirmó que las Aduanas de nuestro país carecen de técnicos especializados en identificar si lo que declaran los importadores, con respecto a sus mercancías, se ajusta a la realidad o no; especialmente, en textiles y prendas de vestir. Agregó que varios malos importadores declaran que sus productos tienen un menor valor con la intención de pagar menos aranceles, menos IGV y, por lo tanto, luego además no pagan impuesto a la renta, pues gran parte de lo que ingresan haciendo trampa lo venden en el mercado informal.

“Esta práctica desleal de comercio perjudica, en primer lugar, al Estado, que recibe menos impuestos, cuyos recursos pueden ser derivados a para ejecutar obras en beneficio de la población. En segundo lugar, la industria formal también es afectada porque no puede competir en igualdad de condiciones con los precios irreales de los subvaluadores; perjudicándose así el empleo y la inversión en el sector industrial”, declaró.

En ese sentido, indicó que al menos el 40% del valor declarado en hilados y tejidos importados ingresa al Perú subvaluado; de ahí la importancia de la labor técnica de apoyo a la Aduanas que realizan los Veedores del sector público y privado.  A esto hay que sumar la subvaluación en la importación de prendas de vestir en donde el problema es más grave aún.

Asimismo, sostuvo que, en el marco de la normativa de Aduanas, el Comité Textil de la SNI, que participa como observador en los reconocimientos físicos de las mercancías importadas, constató que la gran mayoría de las declaraciones aduaneras registradas entre enero y setiembre de este año presentaron información incorrecta; contaminando la base de datos de referencia de Aduanas y favoreciendo la subvaluación, estrategia que aplican los subvaluadores para sacarle la vuelta al fisco.

En esa línea, Reaño señaló que la propuesta del gremio es que se modifique el sistema de cobro de aranceles de importación, cambiando el mecanismo actual de Ad-Valorem CIF por un sistema mixto de dólares/kilogramo neto. Explicó que esta propuesta ya fue alcanzada al Ministerio de Economía, PRODUCE y MINCETUR, y que consiste en fijar precios indicativos en dólares por kilogramo neto.  Colombia ya lo hace, al igual que EE.UU., India –con quien pretendemos suscribir un TLC-, así como Suiza, etc.

“Toda importación que venga por debajo de ese precio indicativo, paga arancel en base a dólares por kilogramo neto; y todo lo que viene declarado por encima del precio indicativo, paga el arancel nacional de 11%. No pretendemos que se eleve el arancel, porque la industria es suficientemente competitiva para enfrentar la competencia con el arancel vigente del 11%, pero nadie puede afrontar la competencia desleal que genera aquel que declara menos de la mitad de lo que realmente pagó y el sistema se lo permite”, manifestó.

Además, advirtió que más de la mitad de importadores que declaran ante aduanas son personas naturales, muchas de las cuales no pueden justificar los grandes montos invertidos en la importación. Es decir, la importación subvaluada de textiles y confecciones constituiría también una modalidad recurrente empleada para el lavado de activos y que el Estado está en la obligación de corregir.  Todas estas acciones además, también perjudican a los importadores formales que son los primeros que deberían apoyar la preocupación de la SNI.

Al respecto, cabe recordar que hace unas semanas el presidente de la SNI, Ricardo Márquez, propuso la creación de un registro de importadores, como un mecanismo para combatir la subvaluación y el lavado de activos. Márquez refirió que es imprescindible que el Estado garantice la transparencia en el comercio y siga el ejemplo de Colombia, cuyas medidas para frenar la subvaluación han sido respaldadas por la Organización Mundial del Comercio (OMC).

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